Nada de colectora, todos por autopista y compartimos gastos. El tren hasta las manos pero a horario. Subte ni en-pedo, todos quieren un poco de sol, pero se nubla a cada rato. Pero es viernes.
En las oficinas son otras caras más pintadas, y en algunas el "casual day" permite confirmar imaginadas curvas y bultos. En los bancos, todo celeridad y al cierre "cajoneo". Los muchachos de la obra: fueguito y cacho de falda con chamamé desde las 11 de la mañana. En el comedero de la empresa filet con puré o napolitana con fritas, pero de bola de lomo. Porque es viernes.
Festejamos bromas estúpidas y chistes repetidos. Bancamos un poco más al jefe y al café de la máquina, que tira más a jugo de sobaco de brasilero que a café. Las chicas de la mercería compraron coca y bizcochitos de grasa en la panadería. Y apareció el florista de la esquina.
Mediodía en la plaza, empanadita al sol y aguita mineral imaginando playa de enero loco. Pero vuelven al laburo casi antes de la hora, porque es viernes! Tarde fugáz y el Rey de los hinchapelotas que aparece con complicaciones a la hora de cerrar.
La mar de-kilombos para salir de la Capi en hora pico, no por piquetes ni protestas, que según parece están tan bien organizadas que hasta tienen horario de finalización tipo 3 o 4 de la tarde, cosa que no los agarre el tránsito para volver, sino porque es viernes. Todos con auto, algunos-pijoteando los 50 mangos que le cargaron a la mañana mientras le sacaban la telaraña, otros tanteando por celu a ver que pinta para la noche, y otros con planes fijos y ventanillas abiertas para que entre el fondo ambiental de la coartada perfecta, como una reunión de última hora. También los "cada vez menos y más buscados", vuelven al abrigo de cristales oscuros y escuchando bajito el regreso en Aspen, o un poco más fuerte a la Negra Bernasi y con la corbata floja.
A los Moto-fleteros aún les dura el efecto y vuelven como una manga de langostas, ocupando los pocos espacios entre coches. Muchos menos pero cada vez más, montamos máquinas de estirpe, quedando exentos de casi todo, avanzando legalmente por izquierda hasta la senda peatonal, luciendo botamangas de vestir, medias negras y botines finos bien lustrados, debajo del equipo negro con protecciones de keblar.
Todos, pidiendo, rezando, implorando, QUE NO LLUEVA ¡!!!
Porque sino el viernes, puede llegar a ser un trágico domingo....
Buen finde para todos!!!!